jueves, 3 de marzo de 2011

me dueles

Me acostumbre a sonreir, me acostumbre a fingir, me acostumbre a dar a entender que era feliz, me empeñé en aparentar quien no soy, me empeñé tanto en mentir, que acabé creyendome mis mentiras. Sufrí tanto tiempo en silencio, que acabé sin nada, tan solo un puñado de sentimientos vacios, de palabras sin significado. Y aunque creas que el corazón solo puede romperse una vez, y que lo demas son simples razguños, no lo son. Cada palabra certera es un pedazo que se rompe de nuevo, un trozo que quedará para siempre separado del resto. Lo más doloroso es saber que siempre formaré parte de tí, al igual que tú de mí. Sé que, a pesar de no haber echo más que hacerme daño, solo lo haces para que sienta lo mismo que pasastes tú por mi, y duele, pero a diferencia de tí, lo mio fue un fallo, adelantamos cosas que aun no estaban preparadas para ocurrir, que aún les faltaba tiempo para crearse, que estaban inacabadas. Sólo ten presente que en la vida, a diferencia del ajedrez, el juego continua despues del jaque mate, y será entonces cuando nos demos cuenta de lo que dejamos escapar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario